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Escrito Anónimo.
La primera vez que besé a una chica comprendí que había algo más que simple curiosidad dentro de mí, fue una sensación distinta a la que sentí cuando besé a personas del sexo opuesto, pero lo distinto, solo fue sinónimo de agrado; al principio no quería caer dentro de una etiqueta porque eso solo limitaría toda clase de sentimientos que podría llegar a experimentar.
Tiempo después conocí a personas pertenecientes a la comunidad LGBTTTIQ+. Algunos de mis amigos que se autodenominan homosexuales me platicaban que en su búsqueda de identidad y orientación confesaron primeramente proclamarse bisexuales “por un determinado tiempo”, algo que me alarmó bastante ya que eso indicaba que la bisexualidad podía ser tomada como una faceta intermedia, incluso transitoria entre lo que de verdad eran. Por un momento mi persona se sintió confundida, porque de alguna manera yo tenía en claro la atracción que llegaba a sentir por personas tanto del sexo opuesto, como de mí mismo sexo.
También llegué a escuchar comentarios acerca de cómo mi orientación sexual se convertía en un fetiche, en una manera más de sexualizar y convertir a mi persona en alguien promiscua e infiel, o sencillamente me hicieron ver que soy una persona confundida y que esta etapa sólo podía ser producto de una carencia o trauma, hasta llegar a la negación misma de lo que siento y de lo que soy.
Mucho de esto es resultado de los mitos que hay en torno a la bisexualidad, heredado de la heterónoma y la monogamia, ya que se asume que nuestra orientación sexual debe determinar las prácticas sexuales solamente con un género correspondiente al binarismo establecido.
Como consecuencia, la bisexualidad se convierte en un constante bombardeo de comentarios hirientes y arraigados a la cosificación de nuestros cuerpos, pues se nos resume a solo un ser que “tiene más de dónde escoger” y de esta manera, nuestra orientación sexual se vuelve objeto de una fantasía, invalidando nuestra identidad.
Puede que al leer esto te hayas sentido identificado o identificada, o tal vez te haya recordado a algún amigue o a cierta persona que acabas de conocer y déjame decirte que no estás sola, recuerda que nuestra, la bisexualidad existe pero lamentablemente la bifobia también, la cual puede manifestarse desde pequeños comentarios llenos de estigmatización hasta la violencia y discriminación, actualmente de acuerdo con Barker Meg (2012), “las personas bisexuales tienen los peores problemas de salud mental, incluyendo las altas tasas de depresión, ansiedad, autolesión y suicidio” (p. 4), demostrando así, algunas consecuencias de la invisibilización hacia las personas bisexuales. Vivimos en un mundo en donde la dicotomía entre heterosexual y homosexual es latente, y cuando alguna persona interactúa sexoafectivamente con estas dos esferas se le tacha de indeciso o promiscuo.
Nuestra identidad puede ser compleja y distinta a lo que socialmente se “acepta” como “normal”, pero lo distinto no es malo, nunca debes negar una parte de ti para solo encerrarte en una categoría; ser bisexual no es solo una etapa, ni un sentimiento de confusión, el ser bisexual es tan real como toda la comunidad LGBTTTIQ+, por lo que te invito a ti lector, a pensar en los pequeños comentarios que dices, en las pequeñas acciones que haces, ya que tanto las palabras como las acciones tienen un fuerte poder en las personas: todos somos diferentes y tenemos la libertad y el derecho de amar libremente, siempre y cuando no dañemos a nadie.
La bandera simboliza la combinación de los colores magenta y azul, dando como resultado un único color morado; no es mitad azul, ni mitad magenta, solo es morado, representando así que la bisexualidad no es dividirte en dos esferas, si no en una sola como un todo.
Bibliografía
Barker, M., Richards, C., Jones, R., Bowes-Catton, H., Plowman, T., Yockney, J. & Morgan, M. (2012). The bisexuality report: Bisexual inclusion in LGBT equality and diversity. Milton Keynes: The Open University Centre for Citizenship, Identities and Governance. ISBN: 978-1-78007-414-6.
Bembe, L. (2020). Mitos y realidades sobre la bisexualidad. Revisado 8 Julio 2021, from https://helloclue.com/es/articulos/lgbt/mitos-y-realidades-sobre-la-bisexualidad
Esteban C, Vazquez-Rivera M. La “B” que no se ve: Invisibilización desde los diagnósticos y desafíos para la divulgación de la orientación sexual de hombres y mujeres bisexuales. p. 29, 41–62.
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